Ante los incidentes, la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados instaló vallas metálicas para evitar posibles conflictos y más enfrentamientos entre los extranjeros.
La Guardia Nacional de México llegó el jueves a las instalaciones de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), en Tapachula, frontera con Guatemala, para poner orden tras un altercado entre migrantes de varios países.
Luego de que suspendiera sus actividades el 30 de julio para que sus oficinas fueran higienizadas por el covid-19, la Comar reinició labores ayer, pero su reapertura provocó la llegada de cientos de indocumentados.
Los migrantes centroamericanos, cubanos, haitianos, así como de otros países intentaban reanudar sus trámites. No obstante, la cantidad de personas rebasó el control de personal de la comisión.
Los indocumentados comenzaron a discutir y a empujarse provocando varios altercados. Los agentes de la Guardia Nacional llegaron al lugar y formaron una valla humana a fin de contener a los extranjeros.
Otras medidas para evitar conflictos entre migrantes
La Comar instaló vallas metálicas para evitar posibles conflictos y más enfrentamientos entre los migrantes.
Mientras que la Guardia Nacional tomó el control de los accesos principales de la comisión mexicana y su presencia evitó que se formaran aglomeraciones.
Los agentes del servicio de Protección Federal invitaron a los extranjeros a mantenerse alejados de las filas ya que los trámites y las citas se deben llevar a cabo de manera electrónica y solo tenían acceso a la entidad quienes tenían una cita.
El martes, la Comar informó que de enero a julio se han recibido 64 mil 378 solicitudes de refugio en México con los hondureños, haitianos y cubanos como los principales solicitantes.
Además, señaló que, al cierre de julio, han sido registrados como solicitantes de asilo ciudadanos de 97 países.