Al menos 111 personas murieron en el estado de Texas (EE.UU.) por causas relacionadas con la tormenta invernal que afectó desde febrero hasta comienzos de este mes a millones de residentes.
El Departamento Estatal de Servicios de Salud (DSHS) dijo que entre el 11 de febrero y el 5 de marzo, 111 texanos murieron como resultado de la tormenta invernal.
El condado de Harris fue el más afectado con 31 muertos. El área, a la que pertenece la ciudad de Houston, tiene 4,7 millones de habitantes, 43,7 % de ellos hispanos.
En su informe el DSHS dijo que la mayoría de las muertes relacionadas con la tormenta hasta ahora se han asociado con hipotermia.
Niño de 11 años entre las víctimas de la tormenta
Una de las víctimas fue Cristian Pavón, un niño de 11 años de la localidad texana de Conroe, que murió en su habitación después de pasar la noche sin electricidad.
La familia del pequeño demandó a dos de los proveedores de energía del estado alegando «negligencia grave» y «homicidio negligente», según la denuncia.
Para el 19 de febrero casi la mitad de los 29 millones de habitantes del estado habían sufrido numerosas interrupciones del servicio de agua.
Además, centenares de supermercados de grandes cadenas tuvieron que cerrar sus puertas por la escasez de alimentos.
Todas estas condiciones abonaron la situación para el alto número de fatalidades.
El DSHS dijo que los decesos también se dieron por accidentes automovilísticos, intoxicación por monóxido de carbono, fallas de equipos médicos, exacerbación de enfermedades crónicas, falta de oxígeno en el hogar, caídas e incendios.
EFE