Colorido, fervor y tradición guatemalteca engalanan Manhattan por aniversario de Cristo de Acapetagua. Así celebraron los chapines.
El frío del otoño en Nueva York fue opacado el pasado sábado 6 de noviembre por la calidez que los chapines de la comunidad de Cabricán, un municipio del departamento de Quetzaltenango, en Guatemala, externó durante las actividades por el tercer aniversario de la llegada de la imagen de Cristo de Acapetagua a Manhattan.
Al mediodía, las calles que estaban llenas de hojas secas fueron el marco que dio paso a la puerta de la Iglesia San Carmelo, ubicada en la 441 East y 115 St. Dentro de esta se llevó a cabo una Eucaristía que fue amenizada por el Coro Unidos por Cristo, que festejaba su segundo año de creación.
Ataviados con sus mejores galas, muchas de las cuales representaban a su comunidad ubicada en el occidente de Guatemala, familias enteras se dirigieron al salón comunal del templo. Minutos más tarde se presentaría el Convite Manhattan NY, Juventud de Acapetagua.
“Es muy emocionante para nosotros haber traído un pedacito de Cabricán hasta acá. Celebramos con mucho fervor la llegada de la réplica de la imagen de Cristo de Acapetagua, patrono de nuestro pueblo”, expresó Galindo López, presidente y fundador de la comunidad.
Llega el alegre convite de los chapines
Las 10 parejas de jóvenes integrantes del Convite dieron paso a su presentación al ritmo de las mezclas de marimba del DJ Gilberto Ramírez. Esta fue aplaudida por la concurrencia que admiraba sus creativos trajes, los cuales fueron traídos desde Quiché, en Guatemala.
Antes de comenzar con ritmos alegres, la junta directiva de la actividad pidió al público hacer un minuto de silencio en memoria de Dagoberto Ramírez, integrante del grupo de disfraces, quien falleció hace algunos días.
La fiesta continuó por varios minutos más, hubo pastel y una cena de gala. Actividades que reforzaron los lazos de amistad entre migrantes que extrañan la tierra que los vio nacer.