Los municipio de Santa Catarina Ixtahuacán y Nahalá, en el departamento de Sololá, mantienen un conflicto de tierras en Guatemala.
Un histórico conflicto de tierras en Guatemala llegó a un punto de extrema violencia al final de la primera quincena de diciembre de 2021.
Los hechos ocurrieron en el sector conocido como Chiquix, algunos dicen que es una aldea, mientras que para otros es un cantón. El sector se ubica en el área limítrofe entre los municipios de Santa María Ixtahuacán y Nahualá.
Allí, los pobladores se quedaron entre el fuego de las comunidades de los referidos municipios, las cuales se disputan si la región es de uno u otro.
Crisis en Guatemala
El primer aviso oficial de la situación lo dio a conocer la Policía Nacional Civil (PNC), el viernes 17 de diciembre en horas de la tarde, cuando se alertó acerca de la muerte del agente Luis Herbert Emmanuel Reinoso Rivera, quien estaba de servicio.
Poco poco se fue difundiendo información de la masacre a través de los medios locales y posteriormente las agencias internacionales mostraron su atención en los hecho violentos.
Más de 600 elementos de las fuerzas de seguridad pública de Guatemala ingresaron al sector un día después y, según los reportes, constataron que:
- La violencia resultó en la muerte de más de 10 personas, entre menores de edad y adultos, así como hombres y mujeres.
- Un autopatrulla había sido atacado.
- Había restos de un camión, el cual fue incinerado.
Este lunes 20 de diciembre, cientos de personas realizaron un bloque en la carretera, en el kilómetro 170 de la ruta Interamericana, como medida para rechazar la violencia y exigir a las autoridades mayor seguridad.
¿Qué paso?
La versión que se conoce de los hechos señala que un grupo de agentes de la Policía guatemalteca acompañaba a varios comunitarios, los cuales se dirigían a efectuar labores de cuidado y corte de maíz.
El ataque fue dirigido tanto la camión que transportaba a los comunitarios y al autopatrulla de la PNC.
Varios elementos policiales huyeron del sitio para salvar sus vidas, y no pudieron hacer nada por los pobladores.
El gobierno guatemalteco lamentó los hechos y afirmó que «las autoridades tomarán las medidas necesarias para garantizar la seguridad, el respeto a la vida, la paz y la gobernabilidad en Sololá».
La Policía reportó el domingo 19 de diciembre la captura de tres hombres. Estos fueron sorprendidos mientras trasladaban por la vía pública un fusil, armamento calificado como de uso exclusivo de las fuerzas de seguridad.
Medios locales detallaron que los aprehedidos dijeron que eran miembros de la comunidad que sufrió el ataque, y que no tenían relación con los hecho violentos.
Además, que el arma es utilizada para la defensa del sector. Las autoridades investigan si el fusil fue usado en la masacre.