Condenan a dos por someter a migrantes a trabajos forzados
Los vejámenes en contra de los migrantes guatemaltecos ocurrieron entre 2016 y 2018, según se determinó en la investigación del caso.
Los miembros de una pareja de origen guatemalteco, dueños de un restaurante y una empresa de limpieza en California, fueron sentenciados el pasado lunes 2 de mayo por conspiración para someter a tres migrantes a trabajos forzados, informó el Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ, por sus siglas en inglés).
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Nery A. Martínez Vásquez, de 54 años, y su esposa Maura N. Martínez, de 54 años, ambos naturalizados estadounidenses, se habían declarado como culpables el año pasado de someter a trabajos forzados a una madre guatemalteca y a sus dos hijas.
Martínez Vásquez fue sentenciado a 6 años y medio de prisión y la esposa a 3 años.
Ambos acusados también fueron sentenciados a 3 años de libertad supervisada y a pagar una multa de US$25 mil. También deberán pagar U$300 mil en restitución a siete víctimas.
Investigación
Según documentos judiciales, los esposos, dueños del restaurante Latino's y de una empresa de limpieza que prestaba servicios a varios negocios en la localidad de Shasta Lake, en el norte de California, “utilizaron varios medios coercitivos” para obligar a sus víctimas a trabajar largas jornadas, siete días a la semana, sin pago o con mínimo pago.
Los Martinez conspiraron para traer a una familiar y sus dos hijas menores de Guatemala a Estados Unidos con visas temporales de visitante.
Tras expirar su permiso de estancia en EE. UU., las migrantes fueron obligadas a trabajar entre septiembre de 2016 y febrero de 2018 extenuantes horas en el restaurante y el negocio.
Según el DOJ, los acusados impusieron una deuda a las víctimas para evitar que regresaran a Guatemala, las sometieron a abusos físicos, psicológicos y verbales, y separaron a la mujer de sus hijas, todo para obligarlas a trabajar.
La pareja también abusó del sistema legal al amenazar a las víctimas con llamar a las autoridades de inmigración y hacerlas arrestar por exceder sus visas si no cumplían con sus exigencias.
Alojaron a las víctimas en un remolque sin calefacción ni agua corriente, y las degradaron y humillaron frente a otros.
Los imputados, además, utilizaron la fuerza y amenazas para intimidar a las víctimas. Nery Martínez incluso golpeó a las niñas con un palo, según la acusación.