El cuerpo del atacante de la escuela de Uvalde en Texas, estuvo por un mes en la morgue mientras su familia discutía quien había sido el responsable y las casas fúnebres no querían recibirlo
Hillcrest Memorial y Rushing Estes Knowles Mortuary se negaron a aceptar los restos de Salvador Ramos, responsable de la tragedia de Robb Elementary en Uvalde, Texas. Finalmente lo recibieron a 80 millas de distancia en una morgue en Lockhart.
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El médico forense Eulalio Diaz le dijo al Houston Chronicle en una entrevista que “Una vez que llegaron a él, las funerarias de la ciudad dijeron: 'No queremos tratar con esto'” quien también se sentía abrumado por resolver la muerte de los inmigrantes.
Día reconoció que podría tomarse hasta un año para lograr completar los informes de la autopsia de Salvador Ramos y las 21 víctimas, pues aun quedan las 53 de los inmigrantes del camión encontrado en San Antonio, Texas.
Finalmente, el atacante fue incinerado mucho más lejos de su casa, en un edificio fuera de las localidades de San Antonio a varios kilómetros de Uvalde.
Taylor Michelle Massey, directora general de funerarias de Rushing-Estes-Knowles aseguró que “Dadas las circunstancias, no sentimos que fuera apropiado o en el mejor interés de las familias a las que estábamos cuidando para tomar la custodia de los restos del individuo que causó su dolor”, y fue por eso que no recibieron los restos de Ramos.