Conoce los 10 consulados de Guatemala que extenderán certificados de nacimiento en EE.UU.
Por lo menos 8 de cada 10 guatemaltecos solicitan certificados de nacimiento en Estados Unidos (EE.UU), documento que a partir de octubre de 2020 será emitido en 10 consulados en ese país, a un costo de US$6.
Este beneficio ayudará a los connacionales a facilitar el trámite y evitar el pago de entre US$100 y US$200 que pedían tramitadores, algunos de ellos, vinculados con las sedes consulares, afirmó el activista Guillermo Castillo, de la Cooperación Migrante en Columbus, Ohio.
Eduardo Hernández, viceministro a cargo de los temas migratorios y consulares, explicó que el plan piloto se cumplirá en los consulados de Chicago, Illinois; Los Ángeles y San Bernardino, California; Phoenix, Arizona; Denver, Colorado; Miami Florida; Atlanta, Georgia; Houston, Texas; Nueva York, Nueva York y Silver Spring, Maryland.
Las sedes referidas son donde ya se emite el Documento Personal de Identificación (DPI, aseveró Hernández. Fuera de EE.UU, los guatemaltecos en Madrid, España, también tendrán acceso a este servicio.
El proyecto surge de la firma de un convenio interinstitucional entre el Registro Nacional de las Personas (Renap) y el Ministerio de Relaciones Exteriores (Minex) y forma parte de los esfuerzos por ampliar y mejorar los servicios que ofrecen los consulados.
La «puerta» para el resto de trámites
Grupos de migrantes aseguran que ante la deficiencia para la obtención del Documento Personal de Identificación (DPI) en EE.UU., la iniciativa es un enorme beneficio para la comunidad migrante ya que el documento abre la puerta a cualquier trámite en los consulados.
“Algunos optimistas aseguran que 3 de cada 10 guatemaltecos en los EE.UU. posee DPI, sin embargo en estados republicanos como en Ohio, el número se reduce a un 1, por lo que los certificados son clave”.
Guillermo Castillo, de la Cooperación Migrante en Columbus, Ohio.
El líder migrante puntualizó que por lo indispensable del trámite, es necesario sumar a más consulados por las complicaciones de movilidad de los connacionales y los controles en carreteras del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés).