¡Que pilas! Silvia Pardo, una artista guatemalteca, ha conquistado corazones y plasmado la esencia de muchas personalidades a través de sus retratos a lápiz.
En el fascinante mundo del arte, Silvia Pardo, una destacada artista guatemalteca, ha conquistado corazones y plasmado la esencia de numerosas personalidades a través de sus extraordinarios retratos a lápiz. Con una trayectoria que la ha llevado a dibujar a figuras como Jaime Viñals, Yuri, Natalia Ramírez, Lorna Cepeda y Julio César Herrera del elenco de "Betty La Fea", su arte trasciende fronteras y conquista admiradores en Estados Unidos y otros países latinoamericanos.
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Una pasión heredada que cobra vida en cada trazo
La pasión de Silvia por el arte se remonta a su infancia, donde observaba a su padre plasmar retratos y pinturas. Este legado artístico se convirtió en su fuente de inspiración, y aunque inicialmente inclinada hacia la acuarela, a los 13 años redescubrió su amor por la figura humana y el rostro. Así nació su viaje artístico, capturando la esencia de personas de manera empírica y perfeccionando su técnica a lo largo de dos décadas.
Retratos que traspasan la realidad
Los retratos a lápiz de Silvia no son simples representaciones visuales, sino capturas vívidas de la esencia de cada individuo. Su habilidad ha alcanzado un nivel extraordinario al reunir, a través de sus obras, a seres queridos, incluso cuando uno de ellos ya no está presente. Un talento que va más allá de la habilidad técnica, conectando emocionalmente a quienes contemplan sus creaciones.
Aunque lleva dos décadas inmersa en el arte, fue en 2014 cuando Silvia decidió emprender su camino con "Silvia Pardo – Arte a Lápiz". Desde entonces, sus retratos han cruzado fronteras, llegando a Argentina, Costa Rica, Ecuador y diversas ciudades de Estados Unidos. Entre sus clientes se encuentran figuras como Capulina, Luis Pellecer, Vicente Fernández, Jorge Salinas, Silvia Pinal, Silvia Pasquel, César Évora y muchos otros artistas, youtubers y personalidades destacadas. No solo limitada a retratos de personas, Silvia también da vida a las mascotas con su arte. ¡Que chilero!