ONU advierte más migración y disminución de remesas
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) advirtió que debido a la crisis económica actual, causada por los efectos del COVID-19, se observarán en los próximos años cambios en patrones de comportamiento de los migrantes, pues han disminuido sus ingresos y por lo tanto el monto de las remesas que envían a sus países de origen.
La ONU estima que para finales del 2021, «al menos 33 millones de personas más pasarán hambre en todo el mundo debido a la disminución del dinero que envían los migrantes», añadió en un informe.
Además señaló que «la pandemia no se trata de una crisis temporal, sino de una profunda disrupción que cambiará los patrones de migración durante años. Los Gobiernos deben tomar medidas para proteger a los más vulnerables», recomendó.
Un informe del Programa Mundial de Alimentos y de la Organización Internacional de las Migraciones, coincidió con la ONU, pues refiere que, el hambre y el desplazamiento de la población mundial aumentará a causa de la pandemia, pues se observarán más personas buscando «desesperadamente un trabajo«.
Caída en las remesas
La crisis que pasarán los migrantes, se verá reflejada en la disminución de las remesas que, según el informe de la ONU, son el sustento de una de cada nueve personas en el mundo, lo que representa a unas 800 millones de personas.
Al respecto, el Banco Mundial (BM), refirió que se espera una caída del 14% para el 2021, en las remesas que se envían a los países de ingresos bajos y medianos, esto se reflejará en inseguridad alimentaria.
Preocupación por Centroamérica
Los países centroamericanos son, en su mayoría, dependientes de las remesas que se envían principalmente de Estados Unidos, es por ello que la ONU mostró especial preocupación por la región denominada Corredor Seco, donde las sequías afectan a Nicaragua, Honduras, Guatemala y El Salvador.
«La situación que se vive es muy difícil, con un 78% de los hogares que dependen de las remesas para sobrevivir o complementar sus ingresos y así comprar alimentos o invertir en la agricultura familiar», añadió el informe de la ONU.
Entre las recomendaciones que se brindaron en el informe del Programa Mundial de Alimentos y de la OIM, está que los migrantes puedan tener asistencia alimentaria y de salud, reconocer la contribución que tienen para sus países de origen, contrarrestar la discriminación y garantizar marcos legales para acceso a sistemas de justicia.
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